Cáncer y fertilidad
El cáncer es una enfermedad que desconoce edades, por eso muchos hombres y mujeres lo padecen aún antes de haberse convertido en padres. Hoy en día, por suerte, existen tratamientos que posibilitan la preservación de la fertilidad en personas que han padecido de cáncer.
¿Cómo puede el cáncer afectar la fertilidad?
El cáncer puede comprometer la fertilidad no sólo cuando se manifiesta en los órganos reproductivos, ya que el mayor problema es la terapéutica para combatir la enfermedad. Es que la quimioterapia y la radioterapia dependiendo de la zona donde se irradie- pueden afectar la fertilidad para siempre, por eso se aconseja que aquellas mujeres u hombres enfermos de cáncer que están interesados en lograr un embarazo en el futuro recurran a algún procedimiento de preservación de la fertilidad.
¿Cuáles son los tratamientos más comunes?
Existen varias alternativas para preservar la fertilidad antes de iniciar un tratamiento oncológico. El sexo del paciente y el tipo de terapéutica a recibir determinarán las opciones disponibles.
Las mujeres que deben someterse a radioterapia en la zona pélvica u abdominal pueden recurrir a transposición ovárica. Esta técnica consiste en mover los ovarios de su ubicación original para alejarlos del campo de irradiación.
En los hombres, la obtención y congelación de varias muestras de semen antes de comenzar el tratamiento oncológico ha demostrado ser suficiente para lograr embarazos por medio de técnicas de reproducción asistida.
En las mujeres, desde mediados de esta década, se utiliza con éxito una técnica similar a la congelación llamada vitrificación. Se trata de un proceso de congelación ultrarrápido que a diferencia de los procedimientos de congelación lenta, evita la formación de cristales de hielo dentro de los óvulos y gracias a ellos la sobrevida de los mismos y luego de la desvitrificación descongelación- es cercana al 90%. Además, permite iniciar la inducción de la ovulación en cualquier momento del ciclo femenino, evitando de esa forma el retraso del tratamiento oncológico.
¿Las terapias hormonales están contraindicadas?
Algunos tipos de cánceres podrían ser estimulados por hormonas, como por ejemplo el de mama. Es cierto que antes de realizar la vitrificación es necesario estimular el crecimiento de los folículos, las estructuras que albergan los óvulos, por medio de hormonas. Sin embargo, los medicamentos que generan este efecto tienen una baja carga hormonal y de corto plazo que, se ha demostrado, no afectan la evolución del cáncer. Es decir que este tratamiento es absolutamente seguro, incluso cuando se trata de tumores hormono-sensibles.
¿El cáncer puede haber dañado los óvulos o espermatozoides?
No, no es el cáncer el que daña a los óvulos o espermatozoides, sino el tratamiento que se aplica para combatirlo. Por eso la presencia de la enfermedad en el cuerpo de una persona no se relaciona con la ocurrencia de problemas congénitos en un recién nacido. Es decir que no se ha demostrado hasta el momento que los óvulos o espermatozoides criopreservados antes de iniciar el tratamiento oncológico generen embriones con problemas congénitos.
¿Si mi hijo tiene cáncer puedo ayudarlo a preservar su fertilidad?
Vale aclarar que los niños y niñas sobrevivientes de cáncer tienen bajas probabilidades de ver afectada su fertilidad en el futuro. Sin embargo, hay algunas alternativas disponibles para quienes desean asegurarse.
En los varones se pueden criopreservar espermatozoides si son adolescentes, no así en la niñez, al menos por el momento. También existen algunos protocolos de investigación sobre el autotransplante de testículo, el cual facilitaría la preservación de la fertilidad en el futuro.
Mientras que en el caso de las niñas pequeñas, la administración de algunos medicamentos hormonales antes de la quimioterapia puede ayudar a que los quimioterápicos afecten menos a los ovarios