Hace algunos días, mi hijo menor y su esposa subieron en sus redes sociales una foto de su hija menor con un título que decía: “Soy muy pequeña para ser la del medio”. Y es que estaban esperando un nuevo hermanito para ella.
La familia se volvió loca con las preguntas de los familiares y amigos. Una prima preguntó si ya sabían el sexo, otro, haciendo cálculos, decía que cumplirían en la misma fecha, de manera que le complacía celebrarlo doblemente. Yo simplemente me preguntaba cómo cambiaría la vida de mi nieta al ser la hija del medio y me puso muy contenta porque yo, al igual que ella, soy la del medio de mis hermanos.
Actualmente los padres tienen, como mucho, dos niños. Se puede decir que el hijo del medio es un caso raro hoy en día. Mi hijo mayor tiene tres niños, pero considerando que los primeros son gemelos, logísticamente y cronológicamente es como tener dos.
Mi hija tiene solo una niña, así que mis cálculos dicen que esta pequeña con su cartel anunciando el tercer hermanito va a ser la única nieta del medio que voy a tener.
Algunos datos estadísticos
En EE.UU. un censo realizado en 2016 reveló lo que tenemos años observando: las mujeres tienen uno o dos niños, lo que representa una reducción del 70% en los últimos 40 años.
Por ejemplo, recuerdo cuando estaba en la universidad en los 70’s, la cifra era al revés, es decir la mayoría de las familias tenían 4 ó más hijos, pero muchos años antes, cuando yo era niña, era normal ver familias con 10 y hasta con 12 hijos.
El costo de tener hijos y su impacto en lo social
Tener chicos, pero sobre todo darles una educación y crianza de calidad, es un proceso muy complejo, costoso, lento y estresante, y por lo general la mayoría de las madres lo enfrentan solas. Y como el mundo se ha vuelto tan competitivo, los padres y madres gastan fortunas en profesores privados o en entrenadors deportivos.
Un estudio publicado en una prestigiosa revista de Nueva York, indicó que la falta del hermano del medio tendrá su impacto en lo social, explicando que estos chicos desarrollan aptitudes muy útiles: son mediadores, arriesgados y seguros para tomar decisiones, pues su ubicación en la familia los hace diplomáticos, comprensivos e incluso, el hecho de que los padres enfocan su atención en el mayor y en el menor, hace que el del medio adquiera más independencia y sean más arriesgados.
Dan como ejemplos de hermanos centrales, el especulador bursátil Warren Buffet o Bill Gates.
De acuerdo con este estudio podría decirse que las habilidades de los niños del medio serán de mucha utilidad en el futuro, así como cotizadas.
Por ahora no me preocuparé por mi pequeña nieta sándwich, un día se dará cuenta de las habilidades que uno aprende al crecer entre las dos fronteras de la atención y en mi caso fueron: el ingenio, la independencia, y la objetividad.