De acuerdo a las últimas investigaciones, el estado psicológico de la madre durante el embarazo y en el postparto impacta de forma directa en la salud del bebé después del nacimiento. Esto sucede porque el feto recibe señales químicas de la madre durante el la gestación que impactan de forma negativa en su desarrollo.
¿En qué consistió el estudio?
El estudio llevado a cabo en la Universidad de California-Irvine descubrió cómo el estado psicológico de la mujer durante el embarazo y después del parto afecta el estado emocional de los bebés, incluso en su etapa intrauterina.
Para el estudio, los investigadores analizaron a mujeres embarazadas con depresión en ambas etapas, antes y después de dar a luz. También estudiaron al bebé luego de su nacimiento para detectar cualquier tipo de alteración en su desarrollo.
Los autores del estudio se sorprendieron al detectar la estrecha relación entre el estado psicológico de la madre y el feto. Cuando la madre experimenta cambios en su estado anímico se altera la actividad neuronal generando cambios químicos que ingresan en el torrente sanguíneo. Estos químicos atraviesan la barrera placentaria y llegan hasta el bebé de la misma manera en que lo hacen el tabaco, el alcohol, las drogas, los medicamentos y otras sustancias químicas.
De esta manera, los bebés pueden estar deprimidos después de nacer si la madre ha experimentado tristeza o depresión durante el embarazo, afectando su posterior desarrollo.
Por otro lado, lo estudio demostró que la inestabilidad emocional materna también afecta a los bebés. Las mujeres embarazadas que no sufrieron depresión antes del parto pero sufrieron depresión luego del nacimiento, también tenían bebés con problemas de desarrollo. Y lo mismo sucedía a la inversa.
“El feto humano es un participante activo en su propio desarrollo y recolecta información para la etapa después del nacimiento. Se prepara para la vida en base a los mensajes que la madre le va proporcionando”, comentó Curt Sandman, uno de las autores del estudio.
Por el contrario, cuando el estado anímico de la madre es bueno se producen endorfinas que llegan al bebé proporcionándole sentimientos de felicidad y bienestar.
El problema de la depresión durante el embarazo
Uno de los mayores problemas es que las mujeres rara vez son diagnosticadas y tratadas por depresión durante el embarazo. Siempre se hace mayor hincapié en el tratamiento de la depresión postparto.
El estudio evidencia entonces cómo los cambios de humor durante el embarazo, y sobre todo la depresión, impactan negativamente en el desarrollo del bebé y merecen ser tratados.
Por esta razón se recomienda evitar el estrés durante el embarazo y consultar a un especialista ante cambios de humor muy frecuentes, tristeza y depresión antes y después del nacimiento.
Estos estados anímicos no sólo afectan la salud del bebé, como lo ha demostrado este estudio, sino que también pueden llegar a empeorar y tener consecuencias graves en la madre.