La mayoría de las mujeres le teme al dolor que supone el parto. Sin embargo, casi ninguna imagina que en muchos casos se puede llegar a sentir un orgasmo cuando nace el bebé. Esto es lo que han declarado numerosas mujeres que experimentaron el llamado parto orgásmico.
De acuerdo a los especialistas, los orgasmos durante el parto y nacimiento son bastante frecuentes y los provocan la intensa estimulación del canal vaginal que se produce mientras nace el bebé.
Thierry Postel, fue el primer especialista que estudió el número de mujeres que tuvieron orgasmos durante el parto. Para su investigación contactó a 965 parteras francesas para que completaran un cuestionario que le serviría para recopilar datos claves.
De ese total recibió 109 respuestas de parteras que habían asistido a más de 206.000 partos de los cuales 668 mujeres declararon a sus parteras que habían experimentado un orgasmo mientras nacía su bebé.
Otros 868 partos fueron de mujeres que habían presentado signos de placer aunque no habían comentado nada, tal vez por vergüenza. Por otro lado, 9 madres respondieron directamente que habían tenido un orgasmo durante el parto.
Barry Komisaruk, profesor de la Universidad de Rutgers, en New Jersey, se dedica a estudiar el orgasmo femenino y dice que la intensa estimulación del canal vaginal puede ayudar a bloquear el dolor, aunque en ese momento la estimulación no sea sexual.
El parto orgásmico tiene una explicación muy simple. Durante el parto se estimula todo el aparato reproductor femenino, incluyendo el cérvix, el clítoris y el útero que presenta contracciones. Estas tres zonas son los que se estimulan normalmente durante un orgasmo sexual y por esta razón el orgasmo también puede producirse durante el parto.
Tanto en los Estados Unidos como en Europa existe un movimiento llamado Alumbramiento Orgásmico (Orgasmic Birth). La organización se encarga de difundir los testimonios de madres, parteras y otros especialistas que declaran haber tenido una experiencia placentera durante el parto.
Para la sociedad, todavía es muy difícil aceptar que el nacimiento de un bebé puede producir un orgasmo a la madre. Este tabú es la razón de que muchas mujeres no lo sientan o niegan declararlo. La vergüenza ante la pareja, los médicos y enfermeras, es uno de los obstáculos más comunes que bloquean este placer.
Por otro lado, la mayoría de las mujeres tienen un parto hospitalario, en lugares con un numeroso equipo médico, monitores, control constante, falta de privacidad sumados al estrés y los nervios. Todas estas limitaciones que se manifiestan dentro del ámbito hospitalario provocan que la mujer se sienta incómoda que da como resultado una experiencia de parto no placentera.
Además, el consenso social relaciona el parto a una experiencia dolorosa. De hecho también lo dice la Biblia: “Parirás con dolor”. Los valores y las normas establecidas serían también las responsables de reducir esta disposición que ayuda a mitigar el dolor.
No obstante, para el movimiento de Alumbramiento Orgásmico, poder experimentar un orgasmo durante el parto confirma que las mujeres presentan una constitución biológica que utiliza el placer como una forma efectiva de mitigar el dolor durante el parto.
De acuerdo a estos estudios y las diversas opiniones bastaría relajarse y estar dispuesta mentalmente para que el cuerpo se entregue naturalmente al placer durante el alumbramiento. Y tú ¿te animarías a entregarte a esta experiencia?