Tal vez te preguntes cómo es posible concebir a un niño con alguien que lamentablemente ya no está más contigo. La respuesta es gracias a las técnicas de fertilización asistida.
Luego de que el esposo de Kristen muriera de linfoma en 2015, la viuda decidió transplantarse uno de los embriones congelados para quedar embarazada a través de una fertilización in vitro (FIV). La gran noticia la difundió a través de un mensaje en Instagram anunciando su embarazo hace casi 7 meses.
“Con mi mamá y la mamá de Sam a mi lado, tuve que transferir nuestros dos últimos embriones”, escribió Tripson. “Hubo muchas lágrimas y mucho amor en esa habitación. Unas semanas más tarde descubrí que estaba gestando a un bebé sano. Y eso está bien. De la forma en que lo veo, tengo un bebé y Sam otro. Es un poco triste… Y sí, muy poco convencional, pero fue nuestra decisión y lo que considero una de las más bellas bendiciones de la vida”.
Tripson dio a luz a su tercer hijo, Lillian Belle Tripson, el 23 de octubre pasado. La niña es muy bonita, sana y es un maravilloso recuerdo y legado de la vida de su padre.
Nos asombra la fuerza de esta mamá y esperamos que este bebé le traiga muchas alegrías y alivios a sus pesares. Ciertamente parece que ha tomado una situación increíblemente difícil y la ha convertido en algo totalmente precioso.
“Sé que esto no va a ser fácil”, “No tengo miedo. Estoy tan emocionada de conocer a esta personita. Es difícil de procesar, pero sólo con la idea de tener una oportunidad de conocer a otro de los hijos de Sam, me hace volar la cabeza”.
Desde aquí nuestro mejores deseos para esta mamá que supo convertir su duelo en algo que trasciende la muerte.
