Lo ocurrido se desenvolvió en el Hospital de la Vega en la localidad de Moreno en Argentina. Daniel y Magaly son los padres que tuvieron que asistir al hospital de manera repentina porque a ella se le adelantó el parto. Pero nunca se imaginaron lo que les iba a pasar.
Un bebé prematuro y una gran confusión
El bebé nació en un estado delicado porque era prematuro, así que tuvo que ser atendido de manera inmediata tras su llegada al mundo. Antes de separarlo de su madre el doctor le dijo: “Eres madre de una hermosa niña, felicidades”.
Esa noche, Magaly estuvo hospitalizada por la intervención quirúrgica. Estaba muy emocionada por ver una vez más a su pequeña, cuando llegó le estaban cambiando el pañal y en ese momento, muy sorprendida, vio claramente que era un niño. Como es de esperar la mamá se mostró desesperada cuando uno de los doctores le mencionó:
“¿Por qué le decís Agustina si es Agustín?”. De inmediato llamó a su esposo y a su mamá que se encontraba en el hospital comenzando una fuerte discusión en vista de la situación.
Las ecografías mostraban que sería una niña
Es de esperar que los padres se encontraran fuera de sí. Su médico obstetra les aseguró tras el parto que se trataba de una nena. Las ecografías mostraban que sería una niña, así que por ello habían decidido darle el nombre de Agustina. El padre angustiado dijo que la confusión fue mucho peor porque nunca le explicaron qué era lo que estaba sucediendo.
“Solo me dijeron que podría tratarse de una patología que tenía el bebé, la cual podría haberse producido al salir del vientre de su mamá. Honestamente no entiendo”, comentó el padre.
¿Fue realmente una patología?
El padre continuó diciendo: “Yo estudié, tengo el secundario terminado y me enseñaron que el bebé se forma en el vientre humano. Mi beba nació prematura, me quisieron decir que era una patología, que el miembro masculino se le desarrolló estando afuera. Yo no puedo entender que tan rápido haya pasado de ser nena a ser un varón. El partero no se puede equivocar nunca, es la primera persona en ver qué sexo tiene la criatura”, añadió indignado.
Entonces, los padres contrataron a un abogado que se encargó de la denuncia. Se llevó a cabo un estudio de ADN para zanjar la cuestión. El estudio mostró que el niño no fue cambiado y que efectivamente es hijo de la pareja. Daniel añadió lo siguiente:
“Lo que pasó es que hubo una falta de comunicación muy grande. Tuvimos una reunión con el director de hospitales públicos y nos comentó que, al ser prematuro y perder el líquido, con el correr de los días recién se pudo ver el verdadero sexo del bebé”.
Esto es algo que puede ocurrir solamente en algunos nacimientos de bebés prematuros. No obstante, con una correcta evaluación se puede determinar el sexo enseguida.
Recuperar el tiempo perdido
Los padres se encuentran muy consternados a causa de la situación. Se están esforzando por recuperar el tiempo perdido con su hijo. Sucede que estaban renuentes a creer que era su hijo, así que no lo habían ido a visitar.
Magaly aseguró: “Ayer lo vine a ver, le traje ropa y le pedí perdón porque perdí tiempo muy valioso y no estuve a su lado. Me duele mucho esta situación, nunca esperamos pasar por algo así”.
