En los últimos años, millones de personas han tomado la horrible costumbre de culpar a los demás por sus problemas, en vez de pensar en qué podrían hacer para cambiar su situación. Esto es algo que aplica para la vida cotidiana y para servicios de gran importancia, como es el caso de la educación, motivo por el cual muchos profesores se han visto atacados sin ser los culpables de las deficiencias.
Los maestros no tienen la culpa
Lisa Roberson es una maestra estadounidense, nativa de Georgia, que ejerció su carrera con orgullo durante varios años y actualmente se encuentra jubilada. La misma ha sido testigo de la evolución del sistema educativo, y recientemente ha expresado que se siente bastante alarmada por las condiciones en las que se encuentra la calidad del aprendizaje en muchos países.
Lisa indica que la educación ya no es la misma que antes, y que esto es culpa de los padres. Esta maestra se ha sentido indignada por escuchar cada día más a las personas decir que la culpa de la educación deficiente la tienen los profesores. Por esto ha decidido levantar la voz en nombre de ella y de todos sus compañeros de gremio.
La veterana educadora ha decidido escribir una carta y enviarla a uno de los periódicos más importantes de su estado, The Augusta Chronicle, con la intención de explicar por qué la culpa no es de los profesores, y conseguir que esta llegue a la mayor cantidad de personas posible.
El verdadero motivo de las fallas en la educación pública
La carta que Lisa envió a The Augusta Chronicle indicaba lo siguiente:
Los Padres tienen la culpa.
Soy una maestra jubilada, y tengo muchos años de experiencia a mis espaldas. He visto como la educación pública ha evolucionado en las últimas décadas, y también como ha decaído en los últimos años. Estoy harta de que personas que no han puesto ni un pie en una escuela pública o en el aula de sus hijos nos digan a los profesores que hacer para mejorar la calidad del sistema educativo.
Muchos nos culpan de que la educación que reciben sus hijos no sea de calidad, pero la realidad es que ¡los maestros no somos el problema!, los padres, ¡ellos son la verdadera causa del problema!, la educación comienza en casa, y la gran mayoría de ellos no ha estado enseñando a sus hijos, valores como el respeto o la empatía.
Tampoco están muy atentos de sus herramientas de estudio, de forma que muchos niños van a clases son zapatos caros o un buen teléfono, pero dejan sus cuadernos y lápices en casa, por lo que los maestros no pueden dar bien sus contenidos. Muchas veces los mismos educadores tienen que ofrecer estas herramientas de sus propios bolsillos para poder dar clases correctamente.
Por eso, cuando vean que la educación de sus hijos está fallando, no culpen a los profesores inmediatamente. Primero pregúntense ¿me aseguro de que mi hijo haga la tarea siempre?, ¿me aseguro de que mi hijo lleve todas las herramientas necesarias a la escuela?, ¿me aseguro de que mi hijo traiga apuntes de clase?, ¿hablo con los maestros?, ¿voy a las reuniones escolares?, ¿los maestros tienen mi número telefónico? Si la respuesta a cualquiera de estas preguntas es “no”, entonces el problema son ustedes y sus hijos. Los maestros no pueden hacer el trabajo de los padres.
Lisa Roberson.
Un sentimiento compartido por todos los profesores
La carta escrita por Lisa ha llegado a millones de personas en todo el mundo, viralizándose rápidamente. Ya ha recibido reacciones muy positivas de muchos profesores, así como de padres conscientes. Ciertamente, la carta reflejó los pensamientos de los profesionales de la educación cuando son atacados y culpados por el deficiente sistema.