Es un debate que viene de antaño: ¿quién debe levantarse a la noche para calmar al bebé? A veces, se soluciona simplemente por el que trabaja más al otro día o se levanta más temprano. Otras parejas lo resuelven turnándose día por medio. Sin embargo, ahora la ciencia sugiere quién debería ir a la habitación del bebé cuando llora para que ninguno se haga el dormido.
Los resultados de una investigación publicados en el Journal of Sleep Research demostraron que despertarse durante la noche daña la memoria operativa de la mujer pero no la del hombre.
Una investigación que evaluó el rendimiento de la memoria operativa de hombres y mujeres
Para el estudio se evaluaron a 24 jóvenes adultos de los cuales 12 eran hombres y la otra mitad mujeres que debieron realizar dos pruebas de memoria que se realizaron con dos semanas de diferencia.
El primer test se realizó a la mañana siguiente luego de que los dos grupos durmieran durante toda la noche sin interrupciones. Para la segunda prueba, se realizó el mismo cuestionario pero sin que los grupos durmieran en absoluto.
Las datos obtenidos del último estudio revelaron que la memoria operativa de los hombres no se vio afectada, mientras que la de la mujeres sí se veía comprometida cuando estaban privadas de sueño.
¿Los hombres son los que tienen que levantarse a clamar al bebé durante la noche?
De acuerdo al Dr. David Cunnington, especialista en sueño, los resultados de la investigación no ofrecen resultados concluyentes por el pequeño grupo de individuos que fueron evaluados.
Por otro lado, Moira Lang, psicóloga y miembro del consejo del Sleep Health Foundation, cree que si bien el estudio reveló que la memoria operativa de las mujeres se ve más afectada por la falta de sueño, este no es un dato muy relevante ya que existen otros factores que deben tomarse en cuenta.
Según ella, la falta de sueño afecta a ambos sexos de diversas maneras, provocando indistintamente cansancio al día siguiente. Por lo tanto, la decisión tiene que tomarse de acuerdo a cada caso particular.
La especialista sugiere que se debe compartir la responsabilidad observando diversos factores, como quién de los dos tiene un día de más trabajo o simplemente quién es el que necesita dormir más horas para sentirse bien al día siguiente.
“Algunas personas realmente se las arreglan muy bien con cinco o seis horas de sueño, y otras personas necesitan nueve o diez y [el cansancio al día siguiente] es terrible si no lo consiguen” agregó Lang.
De modo que existen diversos factores a la hora de tomar la decisión sobre quién debe levantarse a la noche para calmar al bebé. No obstante, hay que tener en cuenta que la lactancia es un factor determinante: un bebé que se despierta con hambre necesita únicamente de la madre, a menos que se haya optado por darle el biberón.
