Las temperaturas a las que una mujer se expone durante el embarazo pueden aumentar el riesgo de tener bebés de bajo peso al nacer. Así lo demuestra un nuevo estudio llevado a cabo por investigadores de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos que fue publicado recientemente en la revista científica Environmental Research.
Los investigadores sugieren no exponerse a temperaturas extremas durante el embarazo
Los autores descubrieron que la exposición a temperaturas extremadamente bajas o altas durante todo el embarazo aumentaba el riesgo de tener bebés de bajo peso al nacer.
También se comprobó que el riesgo era proporcional al tiempo de exposición. Mientras mayor es la exposición a temperaturas extremas, mayor es la incidencia de bebés con bajo peso al nacer.
“Hasta que podamos investigar más, es recomendable que las embarazadas reduzcan el tiempo de exposición a temperaturas extremas ya sea de calor o frío”, declaró la autora principal del estudio, Pauline Mendola.
¿Cuándo se considera que un bebé tiene bajo peso al nacer?
Se considera a un bebé de bajo peso al nacer al recién nacido que pesa menos de 2,5 kilos. Las causas pueden ser muy variadas y van desde bebés prematuros hasta bebés que nacen sanos pero que genéticamente son de talla pequeña.
Otros niños pueden tener un problema de salud subyacente como enfermedades, infecciones o retraso de crecimiento intrauterino. En comparación con los lactantes de peso normal, los bebés de bajo peso al nacer tienen mayores riesgos de infección y retrasos en el desarrollo.
¿Cómo se realizó el estudio?
Para el estudio, los investigadores vincularon registros médicos de 223.375 nacimientos de 12 centros médicos de EE.UU. con los registros de la temperatura de la región que rodea cada centro.
Los bebés nacidos a término de madres expuestas al frío (menos de 4ºC) durante el segundo o tercer trimestre tuvieron entre un 18 y 21% más de probabilidades de tener bajo peso al nacer. Si esta exposición a las bajas temperaturas fue durante todo el embarazo, el riesgo aumentaba a un 257%.
Por otro lado, los bebés a término que fueron expuestos al calor (más de 32ºC) durante el tercer trimestre del embarazo tuvieron un 31% más de probabilidades de tener bajo peso al nacer. Y si las embarazadas estuvieron expuestas a estas temperaturas durante todo el embarazo el riesgo aumentaba a un 249%.
¿Cuáles son las causas que provocan el bajo peso?
Los investigadores aún no saben cuál es el mecanismo que vincula la exposición a temperaturas muy altas o bajas con el peso del bebé al nacer.
No obstante, los autores señalaron que en estudios previos se sugiere que la exposición al calor podría afectar el peso al nacer puesto que hay un aumento del estrés oxidativo (productos tóxicos formados cuando el oxígeno interactúa con las células y los tejidos) que incrementan la inflamación.
También es posible que estas temperaturas reduzcan el flujo sanguíneo al útero, privando al bebé de oxígeno y nutrientes además de dificultar la capacidad de la placenta para eliminar los desechos fetales.
Finalmente, esta investigación arroja más datos para un estudio realizado en el 2016 donde se informó que el frío y el calor extremo aumentan el riesgo de parto prematuro.
Aunque en la práctica estos consejos puede ser difíciles de llevar a cabo por las embarazadas de acuerdo al lugar en que viven, los resultados son un indicador más de cómo el cambio climático está afectando globalmente a los seres humanos como especie.