El despertar de la joven Amelia Bannan de 34 años luego de haber estar cinco meses en coma y dar a luz en ese estado a su bebé ha conmovido a toda la Argentina. La noticia a impactado tanto que se difundieron rápidamente videos y fotos de la madre con su bebé en los grandes medios de comunicación y redes sociales. La mayoría de los usuarios no dudan en calificar el caso como un milagro.
El día de la tragedia
La joven Bannan es una agente de policía de 34 años que sufrió un accidente de tráfico en noviembre de 2016 cuando viajaba en un vehículo con otras personas. En el automóvil se encontraba también su pareja y padre del bebé que afortunadamente resultaron ilesos. En ese entonces, Amelia estaba embarazada de 34 semanas de embarazo y el siniestro le provocó un grave traumatismo craneal que la dejó en coma.
A pesar de todo, a finales de diciembre, Amelia abrió los ojos y movió las manos, y aunque no era capaz de comunicarse, comenzó a tener contracciones. Como no dilataba, el 24 de diciembre le realizaron una cesárea de urgencia. “Nació en Nochebuena, fue un milagro”, aseguró su hermano César. Santino pesó 1,890 kilos y permaneció un mes en la unidad de cuidados neonatales, aunque la madre volvió a entrar paulatinamente a un coma profundo.
Una recuperación milagrosa
Amelia comenzó a recuperarse y despertó del coma a los tres meses del nacimiento de su hijo. El fisioterapeuta que supervisa su rehabilitación, Roberto Gisin, asegura que la mamá progresa con gran rapidez. “Primero decía ‘sí’ y ‘no’, ahora está logrando contestar preguntas y responder consignas”, explica.
Amelia ya puede darse la vuelta sola, mueve las cuatro extremidades y si no hay contratiempos, Gisin cree que volverá a caminar en algunos meses. Aún así, aclara que es “una paciente de riesgo” y se debe avanzar con prudencia para evitar retrocesos, por ejemplo a la hora de recuperar la ingesta oral de alimentos, que durante cinco meses fue sustituida por una sonda nasogástrica.
“Todavía no podemos hablar de secuelas. Se comienza a hablar fluidamente después de dos años. Yo creo que ella tiene que andar bien. (…) El estímulo del hijo y la familia es muy importante”, agregó Ferreira.
El poder del vínculo entre la mamá y el bebé
Cuatro meses después del accidente, Amelia comenzó a moverse más, intentaba sostener a su bebé, besarle, acariciarle, taparle, e incluso hacía el intento de responder a las preguntas.
Pero el secreto de su mejora es muy particular. Tras todo este tiempo de tratamiento, la familia no dejó de mantenerla en contacto permanente con su bebé. Fue así que Amelia dijo nuevamente “sus primeras palabras” y al preguntarle cosas respondía “Amén”, según comentó su hermano César en Facebook.
“Nuestro milagro junto a su mamá […] hoy se recuperan mediante un milagro por Dios”, comentó también el hermano en un mensaje posterior.
Días antes de despertar, su fisioterapeuta también explicó que la mujer tenía “reacciones distintas”, cuando estaba con su bebé, de las que tenía con cualquier otra persona. Cuando estaba con él respondía al estímulo del niño, tanto durante el llanto como en el contacto piel a piel. Esto sin duda la ayudó a recuperarse más rápido.
Ahora, Santino, con casi cuatro meses, está sano, y su madre podrá disfrutarlo.
“Qué hermoso es escuchar el audio de Amelia hablando y preguntando por Santino, su angelito”, dice una usuaria de Twitter.
“¡Dios existe! ¡Dios hace milagros! Amelia despertó del coma, después de 5 meses. Y el milagro de su pequeño Santino, nacido en nochebuena, mientras su mamá se encontraba en ese estado”, expresó otra mujer.
Sin duda, este estímulo maravilloso tuvo su recompensa y el bebé logró el milagro de que su mamá pudiera salir del coma. ¡Desde aquí le deseamos que continúe recuperándose rápidamente!