¡Al fin estás embarazada! Seguramente ya has consultado a tu médico para saber lo que puedes hacer y lo que no, desde las comidas que están permitidas y las que debes evitar hasta el final del embarazo. Además, seguro que ya te recomendaron que aumentes la ingesta de líquidos durante el embarazo, como también comenzar a hacer ejercicios o realizar algún tipo de actividad física adecuada a ti.
Sin embargo, muchas veces no se dice nada en relación a los productos de cuidado para la piel que existen el el mercado y que pueden afectar al bebé tanto o más que las comidas que no están permitidas.
Por esta razón, aquí te brindamos una lista de aquellos productos y compuestos químicos que deben evitase durante el embarazo.
Retinoides
Se encuentran generalmente en los productos anti-acné, y en medicamentos para evitar el envejecimiento de la piel. Para asegurarte que el producto no lo contiene, fíjate en la fórmula que está indicada en el envase o en el prospecto del producto. Los componentes que debes buscar pueden ser:
- Ácido retinoico
- Palmitato de retinol (vitamina A preformada)
- Retinaldehido
- Adapaleno
- Tretinoino
- Tazaroteno
- Isotretinoina
Hay evidencia científica que indica un mayor riesgo de malformaciones fetales si se utilizan estos compuestos químicos. La mayoría de los médicos advierten a los pacientes que si se está realizando algún tratamiento con estos productos, no busquen un embarazo. En el caso de quedar embarazada se recomienda dejar los retinoides inmediatamente.
Tetraciclinas
Las tetraciclinas son antibióticos que no deben utilizarse durante el embarazo. Se utilizan generalmente para tratar el acné. Los componentes que debes buscar en el envase o prospecto son:
- Doxiciclina
- Minociclina
Los estudios demostraron que el uso de estos químicos produce daños en el hígado de la mujer embarazada, como también el descolorimiento de los dientes del bebé en gestación.En el caso de necesitar antibióticos durante el embarazo, existen alternativas seguras como la amoxicilina o la eritromicina.
Hidroquinona
La hidroquinona es un químico que se utiliza para tratar las manchas oscuras en la piel, que casualmente muchas veces aparecen durante el embarazo, como el melasma, también conocido como la “máscara del embarazo”. Este producto debe evitarse hasta el nacimiento del bebé. Los componentes que debes buscar en el envase o prospecto son:
- Hidroquinona
- 1,4-dihidroxibenceno
Según las últimas investigaciones, se ha demostrado que el 45% de esta medicación es absorbida por la piel y llevada al torrente sanguíneo de la madre. Como no hay estudios que indiquen cuáles pueden ser los efectos nocivos sobre el bebé, y al presentarse en tanta cantidad en la sangre de la embarazada, se desaconseja su uso por la posibilidad de complicaciones aún no descubiertas.
Ftalatos
Generalmente, los ftalatos se agregan a los productos plásticos para hacerlos más flexibles, para aumentar su resistencia y efectividad. Por eso se los utiliza en perfumes o en esmaltes para uñas. Los componentes que debes buscar en el envase o prospecto son:
- BBzP (ftalato de bencilo y butilo)
- DBP (ftalato de dibutilo)
- DEP (ftalato de dietilo)
- DMP (ftalato de dimetilo)
Los últimos estudios indicaron que el uso frecuente de ftalatos aumenta el riesgo de padecer hipertensión arterial, TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad) y diabetes. Además, en otras investigaciones se lo asoció a desarrollo anormal del embrión. Por esta razón busca productos libres de ftalatos.
Formaldehído
El formaldehído, una sustancia química producida a gran escala en el mundo y utilizada por distintas industrias como conservante y desinfectante. Puede encontrarse en productos de cuidado personal, como en los tratamientos para alisar el cabello, esmaltes para uñas y en pegamento para pestañas postizas. Los componentes que debes buscar en el envase o prospecto son:
- Formaldehído
- Metanal
Este producto químico ha sido clasificado como cancerígeno por los expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Busca productos libres de formaldehído.
Tolueno
Muchos esmaltes para uñas lo contienen, junto a los ftalatos y el formaldehído. Se los conoce como el “trío tóxico” y forman una poderosa combinación de toxinas que deben evitarse siempre, con más razón durante el embarazo.
Los componentes que debes buscar en el envase o prospecto figuran de esta forma:
- Tolueno
- Toluol
- Metilbenceno
- Antisal 1a
Te recomendamos que no utilices estos esmaltes. Antes de utilizarlos verifica que no formen parte del “trio tóxico”.
Amoníaco
El amoníaco se encuentra en muchas tinturas para el cabello. Los componentes que debes buscar en el envase o prospecto figuran de esta forma:
- Amoníaco
- NH3
- Alan
- Espíritu de Hartshorn
- Gas de amonio
Aún está en discusión si las tinturas para el cabello son nocivas durante el embarazo. Sin embargo, aún así, las fórmulas que lo contienen provocan irritación de la piel y de las vías respiratorias, incluyendo los pulmones. Debido a esto se recomienda que no se utilicen durante el embarazo y reemplazar cualquier tintura que lo contenga con otras que poseen una baja cantidad del químico o bien que sean libres de amoníaco.
Dihidroxiacetona
Este químico está presente en muchos autobronceadores en spray. Generalmente los productos indican con una etiqueta que tienen DHA. Sin embargo, verifica en el envase o prospecto que pueden figurar de esta forma:
- DHA (dihidroxiacetona)
- DHAP (dihidroxiacetona fosfato)
El DHA es un químico que reacciona en la capa muerta de la piel de tu cuerpo, dándole color de una manera que muchos consideran más segura que la exposición solar. No obstante, aunque el DHA no es absorbido por la piel, puede ser inhalado al aplicarlo, y esto sí puede ser riesgoso para la embarazada y el bebé en gestación. Por eso recomendamos directamente que evites su uso.
Ácido tioglicólico
Se lo utiliza en muchas cremas depilatorias disponibles en el mercado. Verifica el envase o prospecto ya que puede figurar de las siguientes maneras:
- Ácido tioglicólico
- Mercaptoacetato
- Ácido mercaptoacetico
Aunque no existen estudios sobre los efectos que podría tener en el bebé en crecimiento, la Unión Europeo determino que no puede utilizarse en cantidades mayores al 5% y en los Estados Unidos al 15,2%. La discrepancia entre estos dos datos, combinada con la falta de investigación sobre los riesgos que podría tener para un embarazo, conduce qa que recomendemos que no se utilicen estos químicos durante el embarazo.
Toxina botulínica
Es una neurotoxina elaborada por una bacteria denominada Clostridium botulinum y se la utiliza generalmente en los tratamientos estéticos para eliminar las arrugas del rostro. Se la conoce también como:
- Botox
- Botulina
No existen estudios sobre los efectos del Botox sobre el embarazo. Sin embargo, esta toxina provoca la parálisis de los músculos en donde se la aplica. Esto, asociado simplemente al nombre “toxina” hace que nos replanteemos utilizarla durante una de las etapas más especiales de nuestra vida.
